Cuidar de una explotación agrícola requiere de una serie de conocimientos especializados sobre los cultivos, las técnicas de recolección, las precauciones contra las plagas y los tipos de riego más indicados para cada cosecha. Y es precisamente este último asunto al que hay que prestar una atención especial, ya que dentro del riego hay tipos más adecuados que otros y elegir el correcto es clave para lograr los rendimientos esperados del campo.

En Grupo Sesla acumulamos años de experiencia sirviendo material especializado a agricultores de todo el territorio nacional. Disponer en nuestro catálogo de cubas cisterna, atomizadores y otras maquinarias diseñadas para realizar este trabajo nos ha convertido en especialistas en sistemas de riego agrícolas. Te mostramos cuáles son los distintos sistemas que existen y en qué escenario resultan más eficaces.

Los diferentes sistemas de riego agrícolas

La necesidad de agua de las plantas o árboles, la obligación de servir fertilizantes junto al líquido elemento y la aplicación de tecnologías más o menos avanzadas son las tres claves que marcan la elección entre uno u otro sistema de riego agrícola:

Sistema de riego por goteo

En este modelo, la superficie cultivada se abastece con una estructura de pequeñas tuberías que dejan salir el agua gota a gota, junto a la raíz de cada planta o árbol. Es un sistema que permite dosificar muy bien la cantidad de líquido que llega a cada ejemplar y hace posible minimizar el gasto de agua y fertilizantes.

El sistema de riego por goteo es una fórmula muy utilizada en plantaciones profesionales, de grandes extensiones, donde optimizar los recursos hidráulicos es clave, y también cuando se trabaja en cultivos muy delicados que deben recibir el riego justo para crecer tal y como se espera de ellos.

Sistema de riego por aspersión

La aspersión es diferente, ya que la estructura de canalizaciones acaba en unos aspersores que pulverizan el agua al ambiente, imitando a una lluvia natural; toda esa agua cae sobre el cultivo y la tierra.

Las ventajas de este sistema es que permiten ajustar la potencia y la orientación según las necesidades del terreno, lo que hace posible un mayor control sobre el riego y facilitan el ahorro de agua. Es un tipo de riego muy común en grandes extensiones de maíz, remolacha, trigo o cualquier tipo de cultivo de árbol con raíces amplias y poco profundas.

Sistema de riego hidropónico

Una de las fórmulas más vanguardistas dentro de los tipos de riego agrícola es el sistema hidropónico. Es muy utilizado en invernaderos, para esquejes o para pequeñas y delicadas plantas. En este caso, los vegetales no se cultivan en la tierra, sino que se introducen con su sustrato en una estructura montada a base de tuberías.

Por esas tuberías pasa agua con todos los nutrientes necesarios para el crecimiento de las plantas. De esta manera, el control sobre la alimentación de la cosecha es total, se reduce el uso de plaguicidas y se puede aprovechar un espacio en el que el suelo no sería apto para plantar.

Estos son los principales tipos de riego en explotaciones agrícolas en la actualidad. Los tres son muy utilizados y destierran, poco a poco, a los sistemas más anticuados y poco eficientes como el riego por inundación, el uso de acequias o similares. Si quieres implementar uno de estos tipos de riego en tu explotación, contacta con nosotros.

En Grupo Sesla estaremos encantados de asesorarte y dotarte con la maquinaria necesaria para poner en marcha cualquiera de estos sistemas de riego agrícolas.